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Los cara dura de Amazon.fr

Hace un mes o algo más, compré varios cartuchos de tinta en amazon.uk. Después de una semana recibí una parte del pedido, en el que aparte de los cartuchos, venía un mp3 philips que yo no había comprado y por supuesto, ni pagado.

Me puse en contacto con la empresa, pero parece ser que no me entendieron bien y al poco tiempo llegó el otro paquete que faltaba y me encontré con todo lo que había comprado y un mp3 de regalo.

El mp3 venía de amazon.fr donde yo no había comprado en la vida.

Decidí de buena fé, ponerme en contacto con la empresa de los cartuchos y explicarles el problema. Pero el mp3 no era de ellos, sino de amazon.fr que debió haber usado una pegatina equivocada y me envió un paquete que no era para mi. Yo eso lo tenía claro, dentro había una factura para un chico de Francia. Así que me puse en contacto después de varios emails con amazon.fr y llegamos a un acuerdo (del que ahora me arrepiento), de enviarles el paquete a Francia y que después me devolverían el dinero que me hubiera gastado en enviarlo.

Yo como un idiota, acepté y pagué el envío de algo que no era mío, para devolverlo a Amazon, cuando pude haberme callado y habérmelo quedado.

Después de un tiempo en el que ya debió haber llegado el paquete, no recibía respuesta y decidí responder al email al cual habíamos estado hablando sobre el problema. No volví a recibir respuesta.

El envío sólo me costó 7 euros, pero me costó mi tiempo y después de esto, quedar como un gilipollas.

Por mi propio orgullo más que por los míseros 7 euros, decido ponerme en contacto de nuevo con amazon.fr mediante su sistema de contacto por web. Me responden amablemente pidiéndome disculpas y que me dan un cheque de 7 euros para canjear en mis futuras compras en amazon.fr

La cara de tonto que se me quedó no tiene precio. Yo les devuelvo un paquete que me envían por error y ellos deciden devolverme un dinero que salió de mi cartera, para gastarlos en amazon.fr… donde en la vida he comprado y no creo que compre, más que nada porque no entiendo francés.

Pero el tema no es ese, los 7 euros no los gasté en ellos, no es algo que se cambie de esa forma, sino es algo que se devuelve como salió, en billetes y no en productos de la propia empresa, que encima tengo que pagarlo yo y les sirve como beneficio.

He vuelto a escribirles para decirles que no estoy de acuerdo con lo que me ofrecen y viendo como han funcionado últimamente, me parece a mi que no voy a recibir ni siquiera una respuesta.

Al final actuar de buenas maneras, te puede hacer sentir como un verdadero idiota. Y lo peor, es que ya sé como actuar para la próxima.

Actualizado: me acaban de responder diciendo que tienen noticias de que yo no quiero enviar el paquete, y que los costes del envío son demasiado altos, que me lo puedo quedar o enviar a alguna empresa de caridad…

Actualizado 2: Ahora me vuelven a enviar un email diciendo que me dan esos 7 euros para gastar en amazon.uk. También he borrado los emails, por si pudiera darme problemas por temas de información privada.

 

 

 

 

 

¿Por qué animamos a los deportistas?

Es una pregunta que me he hecho muchas veces y seguro que muchos de vosotros también. Como es posible que paguemos dinero en la mayoría de las ocasiones para animar a alguien en particular o a un equipo, que ha ganado en un año más de lo que nosotros ganaremos en nuestra vida.

¿A alguno de vosotros os animan en la oficina para que hagais mejor vuestro trabajo? me imagino que no, yo diría que todo lo contrario. Además ayudais a la economía española declarando vuestros impuestos, mientras que algunos deportistas a parte de la cantidad de dinero que tienen, se van al extranjero para no dar ni un euro a España, y luego encima quieren que les tratemos como españoles (y no señalo a nadie, verdad Alonso…).

La mayoría de los profesionales de alto nivel nos hacen disfrutar de los deportes al límite, pero no nos basta con eso y los animamos para que lo hagan mejor. Y digo yo: no sería mejor animar al presidente del gobierno para que lo haga mejor o a los médicos para que ayuden a curar mejor a los enfermos. Creo que sacaríamos más beneficio que animar a alguien para que gane más dinero, con un beneficio únicamente propio.

Es curioso ver como a la mayoría de los trabajadores con gran repercusión en la mejora de la sociedad lo único que se hace es criticarlos cuando lo hacen mal, y viven en el olvido cuando lo hacen bien.

Nadie se acuerda de los ingenieros y obreros que diseñan las carreteras por las que circulais todos los españoles para haceros los viajes más cómodos y placenteros, pero si se acuerdan cuando hay un accidente. Bien que se acuerda todo el mundo cuando Torres marca un gol con la selección, o Alonso gana un mundial. Nadie se acuerda de los arquitectos que diseñan vuestras casas para que no vivais en la calle. Nadie se acuerda de los barrenderos que dejan vuestras calles limpias de las basuras que tiramos al suelo.

A mi me es indiferente que haya trabajos más o menos pagados, pero muchas veces los más pagados son los trabajos más inútiles y que menos ayudan a los demás. El mundo de la diversión es el mundo del dinero, y nuestro mundo es el de los pobres.

Un actor, incluso un concurstante que aparece en la tele es tratado como un dios, la gente hace colas por verlos y que les firmen un libro o en el culo, a veces simplemente por el mero hecho de haber aparecido en la tele, sin ningún aliciente mayor.

Yo también me lo paso bien con el deporte, pero creo que no es algo que sirva de mucho mas que para eso, divertir.

Foto | phil

Las bodas más caras de los famosos

Si hay algo que llama la atención de los famosos, son sus excentricidades a la hora de gastar el dinero. Y por supuesto, las bodas no nos dejan indiferentes.
Aquí os dejo las bodas más caras de la historia de los famosos, comenzando por Nicole Kidman y acabando por …

20. Nicole Kidman & Keith Urban

Estimated cost of the wedding: $250,000

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19. Marc Anthony & Dayanara Torres

Estimated cost of the wedding: $500,000

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Continuemos con bodas más caras todavía, que aún quedan por ver muchos puestos y sobre todo, el ganador en despilfarro Sigue leyendo