Todos hemos usado alguna vez o hemos tenido en nuestra casa pegamento Superfuerte. El más conocido el Superglu, aunque ya hay muchos genéricos en el mercado, que tienen la misma fuerza.

Pero tantos años desarrollando tipos de pegamento de contacto, tantos años desarrollando el pegamento más fuerte, tantos años desarrollando el pegamento más rápido y resulta que los envases siguen siendo los mismos que hace 10 años. Y qué quiero decir con esto… pues lo siguiente:

¿Cuantos de vosotros habeis podido usar un pegamento superglu entero durante varios días? Y cuando me refiero entero, estoy diciendo usarlo tantas veces como sea posible hasta que se acabe. Y no sólo eso, sino que al final acabas con más pegamento en los dedos que donde realmente debería estar.

Yo aún estoy en ello, ya que una vez usas un pegamento de este estilo, generalmente se queda un pequeño pegote entre medias de la salida y claro, al día siguiente la salida queda obstruida totalmente, para dejar totalmente inservible el pegamento. Bueno, inservible del todo no, porque también podemos quitarle la punta, dando como resultado:

Conclusión, el tapón de precisión con el que esparcimos el pegamento queda después de pocos usos obstruido. Una vez ocurre esto, debemos quitar ese tapón si queremos seguir usando el pegamento, aunque la precisión se pierde totalmente, sólo pudiendo poner pegotes. Y aún así, nadie nos garantiza que podamos quitar el tapón de cierre al cabo de otros pocos usos.

Asi pues, ¿Para que sirve un pegamento tan super fuerte, tan super rápido, si luego resulta que el envase que lo contiene se bloquea con el primero uso?.

Estas son las reflexiones de alguien, al que más de una vez le ha dejado «tirado» el pegamento y ha tenido que «caga…» en la madre que lo parió. Con lo bien que funciona el envase del pegamento IMEDIO de barra.

Menos pegamentos extra fuertes, menos pegamentos ultra-rápidos y más envases con los que puedas aprovecharlos enteros.